Ha llegado el buen tiempo y con él los viajes a la playa, las salidas al campo, las caminatas por la montaña... Todo para poder disfrutar de la naturaleza, los paisajes, el solecito y de los amigos. Personalmente, soy de playa, ¡a pesar de que detesto la arena!, pero el olor del mar, el sonido de las olas, la brisa marina,...todo esto está asociado a grandes y buenos momentos de mi infancia y adolescencia. También es cierto que una visita al campo a contemplar la naturaleza no tiene nada qué envidiar a una tarde en el mar. El caso es que cogemos a los hijos y a los amigos y nos vamos a pasar el día fuera, cargados de bolsas y comida, y siempre parece que se nos olvida algo. Esta es la parte más engorrosa y molesta, la de prepararlo todo. A mí me gusta hacerlo así:
1. Prefiero que la comida vaya en porciones individuales porque son prácticas para llevar y porque así cada uno se toma lo que le apetezca sin estropear el completo. por ejemplo, pensad en muffins salados o dulces, tartajeas, wrapps, tomatitos cherry, pastelitos mini, etc.
2. Siempre llevo tanto bebidas frías como calientes. En termo se mantienen perfectamente: unas refrescarán la sed; y el cafetito de después de comer todos te lo agradecerán.
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| Servilletas de papel decoradas. En Turquesa (El Entrego) |
3. ¿Vamos con niños? ¡pues preparo actividades! el balón, las palas,... Además, los no tan niños también disfrutarán de ellas, seguro.
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Manteles y servilletas. En Turquesa (El Entrego)
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4. La siesta: ¡bendita siesta! Siempre habrá quien quiera tumbarse un rato a la sombra fresca de un árbol de una sombrilla. Pues procuro llevar algún cojín e incluso una manita de verano para tumbarse, descansar y no resfriarse.
5. Y por último, busco un buen sitio para disfrutar del momento.
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