Pues sí, Chanel, Dior, Bulgari,...ellos y sus estilistas proponen lo que consideran tendencia en cada temporada, pero somos nosotras, las mujeres de a pie quienes decidimos qué será o no tendencia, nosotras elegimos qué ponernos y qué será para nosotras el imprescindible de cada momento. Porque por muy fashion victim que yo me declare, por muy ferviente admiradora de Valentino que sea, lo siento jamás me pondré aquello que o bien no me gusta o bien no me sienta. Considero que la moda no puede, ni debe, esclavizarnos; muy al contrario, debe ayudarme a sentirme una mujer de rompe y rasga, esa mujer estupenda que yo ya sé que soy y que con mis sandalias nuevas pisa fuerte porque así me siento.
Así que si debo enfrentarme a esta temporada primavera/verano 2015 y a todas sus encantadoras tendencias, os preguntaréis con cuáles me quedaría. ¿Qué cosas de las que os llevo enseñando durante los últimos meses serán mis imprescindibles hasta el otoño (algunas seguro que hasta superarán el otoño)?
Ahí van las cinco que me enamoran, ahora y siempre:
El estilo boho-chic. Ese espíritu bohemio supera cualquier temporada y está por encima de cualquier dictado de moda.
Los cabases y sombreros. Aptos para cualquier hora del día, útiles y elevan cualquier outfit.
Velatti. Sus diseños, texturas, colores. En mi joyero ya se guardan unas cuantas muestras de esta marca.
Blanco y negro, y estilo marinero. Ambos son clásicos, simplemente porque funcionan. Elegante y favorecedor, el blanco y negro es un contraste que da mucho juego a cualquier hora del día y en cualquier temporada. Por su parte, el azul marino y el blanco luce como nada al sol. Y además es fácilmente combinable pues acepta sin riesgos accesorios y colores.
Foulares. Siempre, a cualquier hora y en cualquier época del año. Lucen por sí solos como complemento. Esto, junto a su real utilidad (siempre abrigan el cuello en invierno y se agradecen por los hombros en las noches frescas de verano), los hace imprescindibles.
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